Y como una de las que más me gusta es la de naranja amarga, me he decido a hacerla.
El resultado me ha gustado,
pero, más, cuando la acompañé con chocolate negro (74% de cacao); ¡una delicia!
Hay que ver como mejora un buen chocolate el sabor y la vista a cualquier postre.
En dos tarritos, junto con la mermelada, metí unos trozos muy pequeños de chocolate, de manera que al extenderla en el pan quedase mezclado. Queda exquisita, pero tengo pendiente cómo hacer la esterilización de los tarros que llevan el chocolate (tuve que consumirlos en poco tiempo ) ya que imagino que se derretirá y creo que el resultado no será óptimo.
Ingredientes
-1.370 g de naranjas peladas-685 g de azúcar blanquilla
-un limón
-un palito de canela
Elaboración
Limpiar las naranjas con agua jabonosa y un cepillito.Son mejores las que no llevan cera, las naturales.
Pelar las naranjas y guardar la mitad de las peladuras. Quitar lo que más podamos de la parte blanca de las naranjas y partirlas en pedacitos. Pelar el limón, quitarle la parte blanca, partirlo en trozos y echarlo en una olla con las naranjas y el azúcar.
Ponemos a hervir a fuego lento junto con las peladuras. Pasados 30 minutos retirar del fuego. Retirar las peladuras (sólo aprovecharemos unos 75 g. partidos en tiras muy finas). Pasar la pulpa por el pasa purés y con las tiras de las peladuras, volver a llevarlo al fuego hasta que obtengamos una consistencia que nos guste, moviendo el conjunto de vez en cuando.
Retirar del fuego y echar un palo grande de canela. Esperar que se enfríe todo, sacar el palo de canela y envasar, dejar enfriar y esterilizar.